miércoles, 20 de enero de 2010

Hace 365 días, tal día como hoy

¿Sabes lo que estabas haciendo el 20 de enero del 2009? No es una pregunta difícil, un hecho histórico marcaba esa día: el nombramiento de Obama como presidente de los EEUU.
Pero no, yo recuerdo ese día y las 13:48 en concreto por una llamada de teléfono.

Esperando a que nuestra librería cerrara para irnos a comer estaba en el coche cuando suena el móvil con un número ya conocido. Suponiendo que las noticias eran malas (puesto que casi todas las llamadas relacionadas con la adopción así lo solían ser) contesté esperándome lo peor cuando, ya nuestra amiga del alma, nos dice que hay que enviar un par de papeles más ya que viajamos casi de inmediato... "casi de inmediato, casi de inmediato, casi de inmediato" mi cerebro es lo más parecido a una cueva con eco.
Cuelgo y sin creermelo del todo pienso como se lo voy a decir a mi esposa. Esta aparece con un amigo al que vamos allegar a casa. Me parece un momento demasiado personal y bonito para compartirlo con otra persona y tengo que morderme hasta la campanilla para no soltarlo en el trayecto a casa y cuando le dejamos en el portal se lo digo, con toda la suavidad que puedo. A ella le comienza a temblar la voz suavemente y como yo pone cara de no creerlo demasiado. Me confiesa que tiene ganas de llorar y le digo que llore ahora que en breve apenas tendrá tiempo.

Es un 20 de enero y nos han dicho que viajaremos en breve a conocer a Guillermo.

Como anécdota graciosa os confieso que entre llamadas, nervios y emociones en un desplazamiento entre habitaciones me doy tal cañonazo en una de mis maltrechas rodillas que a punto estoy de viajar sin ella a Kazajstán... aunque si os soy sincero hubiera viajado como las cabezas de "Futurama".



Ha sido un año tan intenso, tan feliz, tan perfecto que aún estoy dando la gracias a un país, a unos amigos, a una traductora y a unos tramitadores.

Y desde aquí a tod@s esas mamás y papás impacientes por una llamada, decirles que llega, al final lo sembrado acaba floreciendo, da igual la lluvia, la desesperación, la sequía.... vuestra fuerza lo cuida y mima lo suficiente.
Mucho ánimo.

El 23 de febrero más.